La conquista histórica en San Mamés dejó varios puntos altos en el equipo de Coudet. Uno que viene con un rendimiento parejo al comienzo de la temporada es Pablo Ibáñez, un acierto 100% de la dirección deportiva.
Cuando Sergio Fernández lo fue a buscar nadie pensaba que Pablo Ibáñez se convertiría en el talismán del equipo del Chacho en el puntapié de LaLiga. El navarro llegó en condición de libre luego de 4 años en Osasuna. Desde su debut en Mendizorroza hasta el golpe sobre la mesa en Bilbao, el mediocentro ha cumplido con creces y se ganó un lugar entre los once.
En dupla con Antonio Blanco en la medular o desplazado hacia la derecha, Ibáñez tiene la capacidad de desenvolverse con soltura. Esa versatilidad y su despliegue físico son claves para convencer al entrenador argentino de darle plena confianza. Ibáñez firmó contrato con los babazorros hasta 2030.
El primer rostro del verano
Pablo Ibáñez fue la primera incorporación del Alavés en el último mercado. Fue una total apuesta de la secretaría deportiva comandada por Sergio Fernández y con un contrato de larga duración. Tras una pretemporada exigente como las que suele imprimir Coudet a sus futbolistas, el centrocampista logró acoplarse rápidamente al estilo de juego albiazul.
Con 26 años, Pablo tiene ADN rojillo. Llegó en 2021 al filial del Osasuna, donde debutó en Primera en la 21/22. En total disputó tres campañas completas en El Sadar, alternando partidos como titular y otros como recambio. Al no poder asentarse como pieza clave, decidió no renovar contrato este año.
La gesta babazorra en San Mamés
20 años después, el Alavés pudo cantar victoria en Bilbao. Con una defensa inquebrantable que sostuvo el 1-0 con el cuchillo entre los dientes, el equipo del Chacho coronó un triunfo histórico. Tres puntos de oro que se van a casa. Para magnificar lo conseguido, solo dos equipos habían podido asaltar la Catedral la temporada pasada: Barcelona y Atlético.
Con esta victoria bisagra, el albiazul llega a los 7 puntos y trepa a los puestos de clasificación a Europa. El próximo sábado de local frente a un Sevilla en formación, Alavés intentará confirmar su buen momento.
