La amplia derrota del club bilbaíno frente al Manchester United en la Europa League, deriva de una decisión arbitral bastante cuestionable, con complicidad del VAR, que tuvo varios minutos para analizar la jugada
La serie entre el Athletic Club y el Manchester United en Europa League parece sentenciada, y todo deriva de la tarjeta roja mostrada a Dani Vivian. Aunque en el momento de la polémica jugada, el partido iba 0-1, aún había margen de que el cuadro local pudiese empatarlo y hasta darle vuelta, antes del primer tiempo. Sin embargo, el árbitro condicionó el compromiso.
A partir de la jugada en la que Vivian se fue expulsado de manera injusta (al menos para la mayoría de los espectadores) y no contento con ello, pitaron penalti, el partido se desfiguró. El club visitante aprovechó para irse arriba en el marcador 0-2, y con un hombre de más, liquidó la serie 0-3. Un número que será bastante difícil de remontar en Old-Trafford.
Para Bruno Fernandes, la roja a Vivian y el penalti al United fueron justos
En la polémica jugada que el árbitro dio como penalti y expulsión para el defensa vasco, se ve que no hay una carga lo suficientemente fuerte sobre Hojlund, para considerarse falta. El referí con la ayuda del VAR, interpreta la acción como un agarrón fuerte, que lleva al atacante danés al piso, impidiendo que este empujara el balón a la portería leona.
Para muchos expertos, no era de tarjeta roja, y mucho menos era falta. Por consiguiente, no había penalti. Sin embargo, Bruno Fernandes, atacante del United, explicó que el árbitro actuó en consecuencia y lo hizo bien. “Si hay una entrada, se considera disputa de balón, se deja en tarjeta amarilla. Si hay un agarrón o empujón, se considera que no hay disputa, es tarjeta roja” explicó el delantero portugués, al término del compromiso.
Varias inconsistencias en la jugada que dio el penalti al United y la roja a Vivian
En el momento que se dio el desarrollo de toda la jugada, hay al menos 4 inconsistencias que el árbitro se comió, afectando al equipo bilbaíno. Momentos previos a la jugada principal, el delantero Garnacho se tropezó y a lo que cayó al suelo, el balón le toca la mano. En defensa no se pitaría, pero en ataque sí. Sin embargo, el colegiado consideró que no había sido mano.
Segunda inconsistencia, no hay agarrón de Vivian sobre Hojlund, por lo que no puede haber falta (penalti). Tercera inconsistencia, en caso de haber sido infracción, no era de tarjeta roja, e incluso no había necesidad de sacar ni tarjeta amarilla. Y por último, el VAR no avisó de la mano del delantero hispano-argentino. Y consideró que había la fuerza suficiente para que el defensa hiciera falta sobre el ariete nórdico. Todo esto valiéndose de la tecnología, que en este caso usaron en contra del Athletic Club.
