Tal movimiento está centrado en encontrar un vuelco para la situación deportiva de los dos futbolistas
Ni Donny Van de Beek en el Manchester United ni Saúl Ñíguez en el Atlético de Madrid pasan por su mejor momento en la actualidad. Los dos mediocentros han dejado atrás sus actuaciones estelares para vivir un infierno, cada uno bajo sus argumentos. Eso ha llevado a los directivos a manejarse de cierta manera, buscando explicaciones en el ambiente para encontrarle la vuelta pertinente.
Lo último es que se ha propagado la posibilidad de verles cambiar de elástica, uno a un lado y el otro al otro, en medio de una acción desesperada. Lo que sucede es que las respuestas se han eliminado, y cada día el desespero se apodera de cada uno de ellos. El holandés enfadado por el sometimiento, y el español consciente de su mal desempeño.
Van de Beek está demasiado molesto con sus jefes en el United, todo el camino abierto para su arribo al Atlético
Lo primero que se ha dicho es que la falta de oportunidades ha sido fundamental. Ha fichado por el gigante inglés gracias a la gran oferta que le han realizado sus expectativas eran demasiado altas. No obstante, para Ole Gunnar Solskjaer esto no ha sido motivo para meterle de lleno y le ha ido relegando al banco de los suplentes. Incluso existen futbolista por encima suyo cuestionados desde todo punto de vista.
Él, dentro de sus posibilidades ha investigado e incitado para que le permitan marcharse, teniendo un contrato vigente y por larga duración. Pasó de ser uno de los mediocampistas más cotizados de Europa, al exilio completo, sin posibilidades y sin la más mínima chance de ser un jugador de valor para los ‘Reds devils’. Por todo eso se ha ido prolongando este fin y ha ido migrando a otros planos ligados a la concreción.
Simeone exaltado por las opciones de verle vestido de rojiblanco
Nada está dicho y sin embargo crece como arroz este manto especulativo. El ‘Cholo’ cree en su talento y ve con buenos ojos la posibilidad de realizar un trueque a conveniencia. Saben de antemano que en el Reino Unido están tras los pasos de Saúl y a eso le quieren sacar ventaja. Por su parte Van de Beek está emocionado al saber que puede llegar a uno de los clubes más regulares del continente.
Todo depende en este punto de los jefes, de la capacidad negociadora que incluyan y de las directrices que marquen en ese terreno. Se sabe que las diferencias financieras marcan la pauta, pero ni eso dejará de se run inconveniente si se está de acuerdo. Todo está proyectado a darse justo en este mercado, el de fichajes de invierno.
