La vuelta del central uruguayo ha devuelto la solidez al Atlético de Madrid, que encadena dos porterías a cero y recupera confianza
El equipo de Diego Simeone venía sufriendo en defensa y apenas había podido mantener su arco a salvo en una ocasión. Con Giménez de nuevo en el once, la historia ha cambiado por completo en apenas dos jornadas. La defensa ha vuelto a ser un punto de apoyo para un grupo que empezaba a desmoronarse.
Dos triunfos seguidos y la primera victoria como visitante
El triunfo ante el Real Betis, en la Cartuja, rompió una mala racha fuera del Metropolitano y dio aire al proyecto. Antes, frente a Osasuna, el equipo ya había mostrado señales de recuperación, selladas con otra portería vacía. El efecto inmediato de Giménez se mide en cifras: dos partidos en LaLiga, dos victorias y cero goles encajados.
El uruguayo forma pareja con Le Normand y esa combinación ha devuelto equilibrio a la zaga. La solidez detrás permite mayor libertad en el mediocampo, donde el plan se orienta a crear más juego y vivir menos replegado.

Contraste europeo y un duelo clave frente al Sevilla
En Champions League, el guion ha sido distinto. La goleada sufrida ante el Arsenal en la jornada 3 mostró que los problemas defensivos no han desaparecido del todo. Aun así, el regreso del central supone la mejor noticia para un vestuario que necesitaba frenar la caída.
De cara al partido ante el Sevilla FC, todo apunta a que Giménez volverá a ser titular. La estadística en casa sonríe al Atlético: los sevillistas solo han ganado uno de los últimos quince duelos oficiales disputados en campo rojiblanco. Para Simeone, repetir firmeza atrás es la prioridad absoluta para alejar las dudas de este arranque liguero.
 
					 
                                                    



