El jugón imprescindible del Getafe que Bordalás exige no vender

El proyecto de Bordalás tiene varios protagonistas que forman su columna vertebral. Entre ellos está Luis Milla, con rendimientos dignos de alabar desde hace varias temporadas. En el Coliseum no quieren soltarlo.

El 5 del Getafe dio otra exhibición a balón parado en el triunfo de los azulones ante el Oviedo. Dos asistencias para ser el MVP del partido y volver a mostrar sus credenciales como uno de los mejores mediocentros que tiene LaLiga. En el último mercado veraniego hubo especulaciones sobre una posible salida. Bordalás y todo el pueblo azulón no quieren ni pensar en una salida del madrileño.

En el sur de la capital son conscientes de que en el receso invernal tocarán las puertas de Ángel Torres con ofertas por Milla. El propio futbolista deslizó que estuvo “a la expectativa” en el verano, pero que se siente “querido” y “valorado” en el club. El entrenador alicantino considera al mediocentro un eslabón fundamental en su proyecto.

Un centenar de presencias

Frente al Oviedo, Luis Milla cumplió cien presencias con la camiseta azulona. Y como para no ser menos, se encargó de celebrarlos con lo que mejor saber hacer. Primero asistió a Mario Martín con un tiro libre exquisito y más tarde a Borja Mayoral con un córner desde la izquierda. Esas dos acciones le valieron para ser elegido mejor jugador del partido y resultaron decisivas para que, a balón parado, su especialidad, el equipo conquistara la victoria en el estreno del año en el Coliseum.

En el comienzo de LaLiga, el Getafe se encuentra en zona de Champions League y el ex Tenerife tiene buena culpa de ello. Lleva 4 asistencias en 4 partidos, siendo el líder en las estadísticas de pases gol. La semana que viene, los “guerreros” de Bordalás tendrán una prueba de fuego al visitar al Barcelona.

Getafe, su plenitud futbolística

Luis Milla llegó al Getafe en la temporada 2022-23 de la mano de Quique Sánchez Flores y ahora encara su cuarto curso como azulón. Para el centrocampista supone también su sexta campaña en la élite, tras estrenarse en Primera con el Granada en 2020-21.

Más allá de lo que aporta en el césped con su visión y criterio, su figura también es importante en el vestuario. Allí se ha consolidado como un líder silencioso, clave para mantener la unión y el buen ambiente del grupo madrileño.