El Athletic quiere que no se repita en la próxima temporada de Champions el problema de lesiones con Sancet
La Champions League se huele en San Mamés, y en Ibaigane ya piensan en la plantilla del Athletic Club para la próxima temporada con otro aroma: el de Europa con mayúsculas. Con Oihan Sancet como brújula y a la vez incógnita, el Athletic quiere competencia real en la mediapunta. Y tiene nombre y apellido: Aimar Oroz, una de las jóvenes promesas de LaLiga EA Sports. Para convencer a CA Osasuna, el nombre sobre la mesa es Álvaro Djaló, extremo con proyección y experiencia en fútbol internacional.
Aimar Oroz lleva dos temporadas siendo una de las luces más brillantes de Osasuna. Talento, pausa, visión y verticalidad: un perfil que encajaría perfectamente en el sistema táctico de Ernesto Valverde, o en el del entrenador que venga. El Athletic lo sabe desde hace tiempo y no ha dejado de seguirle la pista como parte de su estrategia de fichajes en el mercado nacional.
El pasado verano ya hubo contactos, gestos, sondeos. Pero no cuajó. Este verano, con Europa en el horizonte y una plantilla que deberá rotar cada tres días, las necesidades cambian. Y las prioridades se aceleran.

Sancet necesita competencia (y estímulo)
Nadie cuestiona la calidad de Oihan Sancet, pero sí su regularidad. En partidos grandes ha sido clave, en otros ha desaparecido. El club quiere rodearlo bien, cuidarlo… pero también empujarlo con una sombra exigente. Aimar Oroz sería eso: una competencia que no llega a quitarle el puesto, sino a obligarle a protegerlo.
Ambos pueden jugar juntos o alternarse. Ambos entienden el juego. Y ambos tienen ADN del norte: juego de verdad, sin artificio.
Djaló, una moneda de cambio con sentido
El caso de Álvaro Djaló es diferente. Llegó desde el Braga con expectativas, pero no ha encontrado su sitio en Bilbao. Entre lesiones, competencia feroz y falta de minutos, ha quedado desdibujado. Pero sigue siendo un jugador con desequilibrio, gol y hambre. Y Osasuna, que perderá a Bryan Zaragoza (regresa al Bayern), necesita un perfil así.
La cesión de Djaló serviría para rebajar el coste del traspaso de Oroz, y al mismo tiempo le daría al extremo la continuidad que no ha tenido esta temporada. Un intercambio con lógica deportiva para ambos bandos.
Mikel González vigila… y espera
Desde la dirección deportiva del Athletic, Mikel González ha seguido de cerca la evolución de Oroz. Le gusta desde hace tiempo. Y si este verano hay fichaje estratégico para reforzar el medio con talento local y experiencia liguera, ese nombre está marcado en rojo.
La clave estará en que Osasuna acepte negociar. El club navarro sabe que retener a Oroz un año más le da estabilidad, pero también sabe que no podrá hacerlo eternamente si no juega Europa. Y si el Athletic mueve ficha con un paquete que incluya cesión, incentivos y una propuesta seria… el trato podría concretarse.
Un trato con aroma de fútbol real
No es solo un fichaje. Es una declaración de intenciones. El Athletic no quiere ir a la Champions con lo justo. Quiere competir, crecer… y ser ambicioso sin dejar de ser fiel a su filosofía.
Y Aimar Oroz representa justo eso: talento cercano, joven, curtido y con ganas de más.