El Celta de Vigo cae en Elche y su entrenador reconoce errores en una dura rueda de prensa
El Celta de Vigo vive un inicio de temporada complicado en LaLiga. Tras la derrota frente al Elche en el Martínez Valero, Claudio Giráldez compareció con gesto serio ante los medios de comunicación. El técnico reconoció que su equipo fue superado en todas las facetas del juego, especialmente en una segunda parte donde apenas lograron reaccionar. “Es un partido en el que nos hemos visto superados, no hemos sido en ningún momento nosotros mismos, no hemos tenido la capacidad de salir de su presión. Creo que somos justos perdedores del partido y nos vale para reflexionar”, declaró. La autocrítica marcó su discurso, dejando claro que el principal responsable de la mala dinámica es él mismo.
“El principal responsable soy yo”: Giráldez admite la mala racha
El preparador celeste asumió la derrota como propia y explicó que el exceso de responsabilidad entre los jugadores está afectando al rendimiento colectivo. Con tan solo cinco puntos en siete jornadas, el Celta ocupa posiciones peligrosas en la clasificación. Giráldez pidió confianza en la plantilla, recordando que muchos de estos futbolistas ofrecieron un gran nivel la temporada pasada. Sin embargo, reconoció que en este curso “nos han pasado por encima, han ido a una velocidad mayor y han tenido muchísimas ocasiones para ganar”. La falta de solidez en los duelos, tanto en la primera línea como en la última, es uno de los problemas que más preocupa al técnico gallego.
Justificación de los cambios
El entrenador explicó también las sustituciones de Ilaix Moriba y Óscar Mingueza, dos de las piezas claves que no pudieron terminar el encuentro. En el caso del mediocampista, arrastraba problemas gástricos desde el día anterior y su estado físico era insuficiente para seguir compitiendo. Mingueza, por su parte, tenía una tarjeta amarilla que condicionaba al equipo en defensa, lo que obligó a modificar el esquema. Giráldez trató de ajustar la presión con Bryan y cambiar referencias ofensivas, aunque sus intentos no evitaron que el rival volviera a dominar con claridad durante la segunda parte.
El papel de Radu y las pocas notas positivas
En medio de un partido difícil, el portero Ionuț Radu fue una de las pocas noticias positivas para el Celta. Con intervenciones de mérito, evitó que la derrota fuera más abultada y permitió que el equipo se mantuviera con opciones hasta el tramo final. Aun así, el propio entrenador reconoció que el esfuerzo de los jugadores no fue suficiente, ya que “no hemos sido capaces de robar en bloque alto ni de imponernos en los duelos”. Para Giráldez, entender mejor el partido y recuperar la intensidad en todas las líneas es fundamental para salir de la mala dinámica.

Lee también
Cinco puntos de 21: un inicio preocupante en LaLiga
El Celta acumula únicamente cinco puntos de 21 posibles, un balance muy por debajo de las expectativas del club y de la afición. Hasta hace dos jornadas, el juego había dejado señales positivas pese a la falta de victorias, pero los últimos partidos han encendido las alarmas. Giráldez reconoció que ahora no se cumplen ni en juego ni en resultados, y habló de un “toque de atención enorme”. Aun así, pidió calma y paciencia, recordando que la temporada acaba de empezar. “No queda otra que trabajar y revertirlo desde el juego”, concluyó el técnico, confiando en que el equipo logre cambiar el rumbo.




