El Celta Fortuna ha arrancado la temporada con una energía que contagia. El filial celeste está demostrando que su propuesta no solo es vistosa, sino también eficaz, con un centro del campo lleno de talento y jugadores que marcan diferencias cada jornada.
En la zona de creación, Hugo Burcio se ha convertido en un referente absoluto. Si no es el mejor pivote de la categoría, está muy cerca. Su lectura de juego, equilibrio y temple son el punto de partida del equipo. A su lado, Coke rinde a un nivel sobresaliente, mientras que Antañón sigue creciendo partido a partido, cada vez más suelto y participativo.
El talento se multiplica en tres cuartos de campo, donde el Celta Fortuna exhibe dinamismo, precisión y una clara vocación ofensiva.
Seguridad atrás y una plantilla con fondo de armario
El bloque defensivo es otro de los grandes pilares del equipo. En los laterales, Joel y Gavián ofrecen fiabilidad y presencia constante en ataque, muy por encima del nivel medio de la categoría. En el eje, los centrales responden con solvencia en cada partido, mostrando carácter y solidez, incluso en los momentos más exigentes.
Y lo más esperanzador está aún por venir: Dela, Ribes, Jaime, Mbaye y Bernard apenas han tenido minutos, pero todos ellos podrían ser titulares en cualquier momento. El fondo de armario es real, y promete mantener la competitividad durante toda la temporada.
El mérito de Fredi Álvarez y la apuesta por los jóvenes
Al frente de este proyecto está Fredi Álvarez, cuya gestión está siendo clave. Ha sabido dar identidad y equilibrio al grupo, apostando sin miedo por los jóvenes y manteniendo un estilo reconocible. Uno de los mayores aciertos del técnico ha sido su confianza en Anxo, un jugador al que le está dando continuidad y protagonismo, y que está respondiendo con madurez.
El Celta Fortuna tiene mimbres para un año grande. Es inevitable que algunos jugadores den el salto al primer equipo —y será una excelente noticia—, pero mientras tanto, el filial promete una temporada divertida, competitiva y llena de ilusión para la afición celeste.