Desde el entorno del entrenador italiano ya hay una postura clara con los descartes
Carlo Ancelotti sigue pendiente del cierre del mercado en el Real Madrid, donde espera que se puedan determinar una que otra llegada sorpresiva. Así mismo, el míster sabe que también deberán darse las salidas de los jugadores con los que no contará, por lo que ha solicitado de inmediato su adiós.
Recordemos que Carlo Ancelotti es un entrenador que da mucha continuidad a un grupo de jugadores y en el Real Madrid esto no ha cambiado. Ya cuenta con una base a la que pocos cambios introduce y donde ahora podrá hacer ciertos ajustes con las incorporaciones que se han dado.
Carlo Ancelotti sigue bastante enfadado por los descartes que no se marchan del Real Madrid
De esta forma, se ha podido establecer que hay tres jugadores por los que ya pidió un adiós, pero que todavía no se determina. Esto tiene bastante molesto al entrenador, ya que son futbolistas que no aportan a la plantilla y lo mejor será que tomen otros rumbos. Sus nombres todavía están vigentes y aún no se logra confirmar su marcha.
En ese orden de ideas, el primero de los efectivos que todavía siguen en el Real Madrid y que Ancelotti no quiere ni ver es Jesús Vallejo. El prometedor defensor no ha podido consolidarse en el club merengue, por lo que le buscan un nuevo destino. Los que más insisten son los equipos de Segunda, pero no ha llegado una propuesta sólida.
Los merengues todavía no efectúan unas marchas que están más que cantadas
Así mismo, Álvaro Odriozola es otro de los que todavía no se marcha, aunque tiene bastante cartel. Eso sí, está a la espera de una oferta de primer nivel, siendo la Real Sociedad y el Athletic dos destinos que han mostrado interés, pero hasta ahora sin avances. No cuenta a pesar del bajo nivel de Carvajal.
Finalmente, uno de los que se quedará a pesar de ser un apuntado a marcharse por pedido de Ancelotti en el Real Madrid es Andriy Lunin. El portero ucraniano estaba listo para decir adiós, pero seguirá a la sombra de Thibaut Courtois. El míster italiano esperaba su salida para incorporar a un suplente de lujo que pudiera exigir al estelar belga.
