En plena reconstrucción, el Valladolid busca formar una plantilla competitiva para soñar con el regreso a Primera. En las últimas horas surgió un nombre querido por el Zorrilla.
En una profunda crisis deportiva que lo llevó al descenso, y con la incertidumbre sobre quién tomará el mando del club, el Real Valladolid atraviesa momentos agobiantes. En medio del pantano, los pucelanos quieren una buena noticia que al menos alivie el dolor por un rato. Hay un deseo llamado Cyle Larin.
El canadiense, que dejó buenas impresiones y un caudal de dinero importante en su paso por el Zorrilla, está buscando equipo. En Mallorca no se adaptó y pidió a sus representantes salir de las Baleares. Los blanquivioletas se ilusionan con volver a gritar sus goles, aunque con la economía del club debilitada será complicado pagarle el salario.

Registros bajos en Mallorca
El de Ontario llegó como una promesa de goles a los bermellones, pero no logró la efectividad por la que pagaron siete millones y medio de euros al Valladolid. Tras una primera temporada en la que fue titular en la mayoría de los partidos, el atacante de 30 años marcó solo 7 goles en 42 partidos. En esta segunda etapa sus números fueron peores y Larin pidió a sus representantes que le busquen nuevos aires.
En la nostalgia del Zorrilla está el paso corto, pero feliz de Cyle. Estuvo cedido una temporada y luego Ronaldo ejecutó la opción de compra al Brujas de Bélgica. Con los pucelanos, el canadiense marcó 8 goles en 19 partidos, siendo el futbolista con mejor registro en el Valladolid.
Ronaldo ya prepara las maletas
El club está vendido. Ronaldo se desprendió del 51% de las acciones y ya no será el propietario del Valladolid. La leyenda verdeamarela firmó un acuerdo para la transmisión del paquete mayoritario a un grupo de inversión norteamericano con el respaldo financiero de un fondo europeo.
Su incursión en el blanquivioleta fue con buenas intenciones, pero terminó en un fracaso. En lo deportivo fue un subibaja, logró dos ascensos y cayó en tres descensos, el último en esta temporada, cuando la sentencia a Segunda llegó aún con un tramo largo de Liga por completar. El club estará en nuevas manos y con un futuro incierto.