Ya se trabaja en ese hecho, con varios argumentos que juegan a favor
Chelsea ha abierto recientemente al público y a la opinión en general sus descartes más sonados. Con esta nueva visualización el cuadro inglés pretende ir dando moldura a lo que consideran es una de sus mejores armas para conseguir liberar fichas y dedicarse a los objetivos que tienen trazados.
En líneas generales se trata de tres activos, un portero, un central y un mediocampista, que por nombre de hecho podrían romper el mercado absolutamente. La crísis les ha llevado a plantear soluciones, y dado que no hay aportantes con la solidez necesaria como para ofrecer compras, la vía de las cesiones terminan siendo su mayor inclinación.
La lista es nutrida, pero ellos se han fijado en los que mejor efecto mediático tienen
El primero en salir del anonimato en cuanto a este tema ha sido Kepa Arrizabalaga. El portero más caro en la historia del fútbol saldrá del Chelsea porque jamás se pudo adaptar a la Premier y a la altas exigencias del club. Su rendimiento ha sido bastante pobre, y sus cifras son desastrosas, 58 goles encajados en 41 partidos disputados. Además su valor de mercado ha caído estrepitosamente.
Sevilla está en la búsqueda de un portero, y les llama poderosamente la atención el ex Athletic de Bilbao. La única pega está en el pago de su ficha, que no podría verse alterada de momento, unos 9,2 millones de euros netos por temporada. A esto habrá que encontrarle soluciones, y manejar internamente el acuerdo con el Chelsea si es que quieren tener éxito.
Además de Kepa, los que van detrás tienen todo el aval del cuerpo técnico
Se trata primero de Antonio Rüdiger, y luego de Tiemoué Bayayoko. El primero es un defensor central que ha pasado las duras y las maduras esta temporada. Ha iniciado como titular y de a poco ha perdido ese rótulo. A sus 27 años sigue siendo un valor de alta consideración para Löw en la selección alemana, y que podría salir con un pago de temporada por valor de 4,5 millones. Asumibles por donde se le mire al club.
Finalmente está el mediocentro francés ex del AC Milan y Mónaco. Su presente habla concretamente de múltiples cesiones, y de un nivel muy bajo en relación a lo que siempre se le conoció incluso en la selección. Aportaría mucho músculo, y mucho nivel para cortar, y para salir jugando de atrás. Todo reposa en las manos de Monchi, quién es el que tiene la palabra final.
