El reto de Asier Garitano con Gaspar Campos para multiplicar las opciones de ascenso del Sporting

Gaspar Campos ha recuperado su mejor versión en el Sporting de Gijón, sumando goles y liderando al equipo con el brazalete de capitán. Su rendimiento será clave para que Asier Garitano multiplique las opciones de ascenso del club en LaLiga Hypermotion

Gaspar Campos ha vuelto a ser la chispa que enciende El Molinón. Su gol número 20 con la camiseta rojiblanca no sirvió para evitar la derrota frente al Almería, pero confirmó lo que ya se intuía, el extremo gijonés ha recuperado la versión que enamoró hace un par de temporadas. La ironía del fútbol es cruel; a veces, el tanto más brillante llega acompañado de una mueca amarga en el marcador.

El regreso de su liderazgo no se mide solo en cifras. Campos volvió a portar el brazalete de capitán, ese objeto simbólico que pesa más que cualquier par de botas nuevas. Y lo hizo con una mezcla de libertad y responsabilidad, de atrevimiento y mesura. El Sporting tiene en él a un futbolista capaz de reescribir partidos, pero también a un guía silencioso que empuja al resto hacia una meta común: el ansiado ascenso.

Números que hablan más alto que los discursos

Las estadísticas, tan frías como el acero, en este caso calientan el corazón del sportinguismo. Sus 20 goles se reparten en 18 encuentros, 14 victorias, un empate y solo tres derrotas. Una ecuación casi matemática que revela un patrón simple, cuando marca Gaspar, el Sporting sonríe. Salvo, claro, en esas dos noches extrañas ante el Racing de Santander en El Molinón, donde sus goles quedaron huérfanos de triunfo, como una carta sin destinatario.

El contraste es evidente, mientras otros delanteros acumulan goles de relleno, Campos tiene la virtud de convertir sus tantos en victorias tangibles. Sus últimas dianas frente a Eibar, Huesca, Cádiz y Cartagena no solo engrosaron su cuenta personal, sino que empujaron al equipo hacia la élite. Una paradoja deliciosa, su instinto individual se traduce en beneficio colectivo.

El reto de Garitano y los desafíos que vienen

En Almería se vio a un Gaspar más eléctrico que nunca, con desbordes incisivos, disparos medidos y una comunicación constante con sus compañeros. Su voz en el campo fue tan importante como sus piernas, un capitán que no solo empuja el balón sino también la moral de los suyos. Garitano, pragmático hasta la médula, sabe que su mejor estrategia no está en la pizarra, sino en mantener a Campos en esta versión desatada.

La próxima parada en El Molinón será otra prueba de fuego. La ausencia de Guille Rosas obligará a ceder el brazalete a Kevin Vázquez, pero eso no menguará la influencia de Gaspar. Al contrario, su liderazgo se mide más en acciones que en adornos. El desafío para Garitano es claro y casi bíblico, sacar de Campos al jugador total que incline la balanza del ascenso. Porque, en el fondo, este Sporting se mueve al ritmo de su capitán sin brazalete.