El nivel de Rafa Mir no ha estado a la altura de las expectativas en el Valencia. El futbolista debe retornar a Sevilla, pero en las últimas horas un posteo en sus redes generó revuelo.
¿Se queda en Valencia? Esa es la incógnita que Rafa Mir deslizó a través de su cuenta de Instagram. Posterior a lo que pudo ser su despedida en Mestalla, el atacante posteó una foto suya con la camiseta del Valencia y dos emojis: una especie de contrato a firmar y un murciélago. La sugestiva imagen provoca una división en las gradas del Che.
El nivel del nacido en Cartagena fue bajo. Disputó 22 partidos sin anotar un solo gol y solo entregó una asistencia. En una primera parte de la temporada que fue desastrosa bajo el mando de Ruben Baraja dejando al equipo en zona de descenso. La segunda parte de la temporada con Corberán, el blanquinegro mejoró, pero Mir siguió desaprovechando las oportunidades.
Ni en Valencia ni en Sevilla
Tras finalizar la cesión en Mestalla, el delantero de 27 años debe retornar a Sevilla donde tiene contrato hasta 2027. Un regreso que no desea ninguna de las partes. En Nervión, Mir no será tenido en cuenta. Hubo un intento del fútbol mexicano para llevárselo, pero todo quedó en la nada.
En ese contexto, Valencia no tiene pensado ni de cerca ni de lejos ejercer la opción de compra de 5 millones de euros por el futbolista. Es por eso que el extraño mensaje de Mir en las redes es una incógnita. ¿Miguel Ángel Corona intentará renovar el préstamo?: en las gradas de Mestalla son muy pocos los que piensan que el atacante puede ser una alternativa a Duro en la fase ofensiva.
Un año plagado de problemas
Tras seis meses de absoluto ostracismo entre su detención por presunto abuso sexual cuya causa sigue abierta, varias lesiones musculares y decisiones técnicas de Rubén Baraja, Rafa Mir no está teniendo su mejor año. Quizás su enigmático mensaje solo sea un método para llamar la atención.
La llegada de Corberán le dio una luz de esperanza al futbolista. Con el entrenador en el banquillo, Mir participó en 14 de 17 encuentros posibles. Sin embargo, el delantero vive del gol y no marcó ninguno. Lejos quedó aquel goleador implacable del Huesca y que se vio, en parte, en su primera temporada en Sevilla. Hoy es solo una sombra y busca un refugio.
