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Los piratas ingleses aliados de AstraZeneca para robar las vacunas de la UE

La guerra abierta entre la farmacéutica y la Comisión Europea se cobra un nuevo episodio

Este miércoles se ha sabido que una planta de AstraZeneca en Gales ha tenido que ser desalojada ante una amenaza de bomba. Un suceso que ha levantado todo tipo de suspicacias, justo en medio de las relaciones convulsas de la farmacéutica y la Unión Europea a cuenta de la dichosa vacuna contra el coronavirus.

El aviso de bomba se ha registrado en la planta de Wrexham, en Reino Unido. Justo el mismo día que estaba programada la reunión en Bruselas entre representantes de AstraZeneca y la Comisión Europea para reorganizar el reparto de las vacunas. La presión es tan grande que no paran de aflorar teorías al respecto.

AstraZeneca
Planta de AstraZeneca en Gales

Las teorías en torno a los retrasos de AstraZeneca

Por un lado, desde la UE acusan a la farmacéutica de haber desviado lotes de vacunas hacia otros países fuera de la UE para obtener más beneficio económico. Algo que se ha encargado de desmentir el propio CEO de AstraZeneca. Sin embargo, un aviso de bomba justo hoy, sin lamentar daños…

Una bomba, si no explota, no existe. No se produce un aviso de bomba falso si realmente se quería cometer un atentado. Pero un aviso de bomba, sí que remueve la conciencia. Por lo que cobra importancia la teoría de que se haya producido con la intención de presionar a la farmacéutica.

La amenaza inglesa

Si alguien sale beneficiado en todo esto, son los ingleses, que según el CEO de AstraZeneca solicitaron la vacuna tres meses antes de la Unión Europea. Unos ingleses que están en medio de un brexit que ya deja claro de por sí su opinión sobre la Unión Europea en su conjunto.

Unos ingleses que están seguros de poder seguir siendo potencia mundial sin la ayuda de Europa. Por lo que acceder a las vacunas de AstraZeneca antes que los rivales de la UE sería un golpe encima de la mesa. Habrá que ver en qué queda la reunión de la farmacéutica con Europa y en qué quedan las investigaciones de lo sucedido en Wrexham.

Jordi Fernández Ben Simmons