Dana White lleva meses trabajando en la pelea entre Jon Jones y Tom Aspinall, campeones del peso pesado de la UFC, pero no ha conseguido alcanzar un acuerdo
Conor McGregor ha sido, durante años, la cara más visible de la UFC. El irlandés ha sido la estrella más mediática de la compañía, pero su carrera no es comparable con la de Jon Jones. El estadounidense es considerado de forma unánime como el mejor peleador de la historia de las MMA, contando con un récord de 28 victorias y 1 derrota por un golpe ilegal, así como con un campeonato en dos divisiones y 12 defensas de título.
Sin embargo, en el historial de Jon Jones comienza a haber un borrón. El peleador está huyendo de Tom Aspinall, campeón interino del peso pesado. Dana White lleva tiempo queriendo cerrar la pelea, que junto con la de Ilia Topuria contra Islam Makhachev es la que todos los aficionados quieren ver. Una pelea que podría llegar a ser considerada como la mejor de la historia de la UFC.

Jon Jones sigue huyendo de Tom Aspinall
Hace apenas unos meses, Dana White se mostró optimista respecto a la posibilidad de cerrar la pelea entre Jon Jones y Tom Aspinall. Sin embargo, el estadounidense continúa huyendo del inglés, quien no le cae bien como persona, por lo que no quiere darle la oportunidad de compartir octágono con él y disparar su popularidad.
No obstante, la realidad puede ser otra muy diferente. Jon Jones, si se retirase en estos momentos, sería considerado por todos como el GOAT de la UFC. Su carrera es difícilmente igualable, por lo que una derrota en estos momentos podría ser desastrosa. Y Tom Aspinall, como ha demostrado, representa una amenaza real para él en el peso pesado.
La retirada del GOAT se acerca
Durante los últimos días, ante la imposibilidad de cerrar la operación, la retirada de Jon Jones ha comenzado a cobrar fuerza. El peleador estadounidense tiene ya 37 años y cumplirá 38 el próximo mes de julio. Además, ya no es tan activo como en el pasado y todo apunta a que podría desaparecer definitivamente del universo UFC.
Del mismo modo, si quiere seguir activo pero sin aceptar la pelea contra Tom Aspinall, la UFC podría despojar a Jon Jones de su cinturón de campeón del peso pesado. En cualquier caso, no es la retirada que un peleador como él merece. Y es que el mejor de la historia merece un adiós glorioso dentro del octágono. Pero el miedo se ha apoderado de él y parece que rechazará el que probablemente sea uno de los mayores combates de su carrera.