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Jon Rahm obligado a aceptar normas para estar en la Ryder Cup

La situación de Jon Rahm con la Ryder Cup y las sanciones de la DP World Tour

Jon Rahm, el destacado golfista español, enfrenta una situación complicada respecto a su participación en la Ryder Cup de 2025 debido a su afiliación con el circuito LIV. Según el nuevo director ejecutivo de la DP World Tour, Guy Kinnings, ha habido malentendidos significativos sobre la elegibilidad de Rahm para el prestigioso evento que se celebrará en el campo de Bethpage, Nueva York. Kinnings aclara que, aunque los jugadores de LIV enfrentan sanciones económicas y deportivas, podrían participar si cumplen con ciertas condiciones.

Este anuncio surge mientras Rahm sigue buscando su primera victoria en el circuito LIV, donde recientemente terminó tercero en el torneo de Adelaide. La controversia gira en torno a las reglas que estipulan que los jugadores deben ser miembros de la DP World Tour y cumplir con los criterios de selección europeos para ser considerados para la Ryder Cup.

Jon Rahm Ryder Cup
Este acuerdo es crucial para que los jugadores de LIV, como Rahm, puedan competir en los majors y, potencialmente, en la Ryder Cup.

Detalles de las sanciones y el camino a la elegibilidad

A pesar de los desafíos, la puerta no está completamente cerrada para Rahm. Kinnings explica que, si Rahm acepta las sanciones impuestas y sigue los procedimientos adecuados, no hay razón por la cual no pueda ser elegible para competir en 2025. Esto incluye la posibilidad de que Rahm tenga que cumplir con una suspensión, que no necesariamente requiere su participación en eventos adicionales de la DP World Tour.

La situación de Rahm destaca la complejidad de las relaciones actuales en el golf profesional, especialmente con la PGA Tour y la DP World Tour negociando un acuerdo con el fondo de inversión pública de Arabia Saudita (PIF) que podría estabilizar la participación de los jugadores de LIV en el ranking mundial.

Impacto a largo plazo y consideraciones futuras

El caso de Rahm subraya las tensiones entre los diferentes tours y las implicaciones para los jugadores que buscan mantener flexibilidad en su participación en torneos globales. Las penalizaciones financieras, aunque severas, son actualmente un obstáculo importante, pero las negociaciones en curso podrían aliviar estas restricciones en el futuro.

La situación de Rahm y otros jugadores de LIV resalta un período de transición en el golf profesional, donde la gobernanza y las regulaciones están en plena evolución. El futuro de las relaciones entre LIV y PGA, así como la estructura de sanciones y elegibilidad para eventos como la Ryder Cup, seguirán siendo puntos focales en el debate sobre la dirección del deporte.