El bicampeón, que podría alcanzar los 2.000 puntos, confía en su coche este fin de semana
Los ánimos del jueves en Silverstone estuvieron más polémicos que nunca y esta vez las palabras de Fernando Alonso causaron más sorpresa. El rechazo general a los comentarios fuera de tono de Nelson Piquet y Bernie Ecclestone se dulcificó durante la rueda de prensa, donde los pilotos se alinearon con los valores del deporte.
Coincidiendo con la presentación del programa Rac(H)er, con el que Alpine pretende incrementar la presencia de las mujeres en la Fórmula 1, el piloto español, Fernando Alonso reiteró su apoyo a la igualdad en el paddock. Se le veía risueño al bicampeón mundial, confiado en las mejoras de su coche.
Trabajar con varias actualizaciones es el objetivo más grande de Mercedes
La lluvia, intermitente, puede alinearse de nuevo el sábado en favor de Alonso. No hay unanimidad en los partes meteorológicos, aunque un asfalto mojado convertiría al asturiano en el gran animador de la sesión clasificatoria. Igual que hace dos semanas en Canadá, cuando partió desde la segunda posición de la parrilla.
La cuarta unidad de potencia del Alpine, estrenada en Barcelona, deberá impulsar a Alonso en su lucha con Mercedes, que parte con ventaja en la lucha por la zona media de la parrilla. Para reducir esta brecha, el equipo francés ha trabajado en los últimos días contra el reloj para llegar aquí con varias actualizaciones.
Fernando Alonso no pierde la esperanza de sus carreras en Silverstone
“Soy razonablemente optimista”, adelantó Fernando Alonso ante los micrófonos en la rueda de prensa, esperanzado en que el regreso a un trazado convencional, tras Montecarlo, Bakú y Montreal, confirme el paso adelante del A522. De sus magníficas sensaciones en Silverstone nadie duda en Alpine. Como muestra basta un dato.
Si el domingo cruza la meta en novena posición, Alonso sumará ya 2.000 puntos, un registro sólo superada por Lewis Hamilton y Sebastian Vettel. Y Alpine, mantiene intacta la fe en Esteban Ocon, pese a que el francés parece incapaz de seguir el ritmo de su compañero de garaje.
