Xose y Marc protagonizan un peculiar encuentro que acaba de la mejor forma posible
Pocos programas de citas han conseguido tanta popularidad como First Dates. El formato, con Carlos Sobera a la cabeza, consiguió una aceptación total entre los seguidores gracias a parejas como una de las últimas invitadas. Dicha cita fue subiendo de tono progresivamente, puesto que tanto Xose como Marc conectaron a la perfección. Pero pocos imaginaban que ambos iban a revelar cuestiones tan personales.
Pero la cita no comenzó con buen pie. Para Xose, la estatura de Marc era un impedimento, ya que no acababa de convencerle. Sin embargo, a medida que transcurría el tiempo, fueron conectando más y más. Pero el paso definitivo para que la cita tuviera éxito lo dieron los camareros, que tuvieron un papel protagonista para que Xose y Marc acabaran teniendo una segunda cita.
El formato ha ido renovándose con el paso de los años. Ahora, los camareros de First Dates ayudan a las parejas que ven atascadas en la conversación. En esta ocasión, utilizaron un juego de azar, por el que tenían que responder las preguntas que le iban haciendo. Unas preguntas algo subidas de tono, pero que hicieron las delicias de los espectadores.
Rápidamente, la conversación elevó su tono, y ambos se fueron encontrando más y más cómodo. Las preguntas sobre sexo contentaron a ambos, que fueron insinuándose el uno al otro. Incluso, Xose le comentó que estaba acalorada, por el vino y por Marc. Algo que gustó al pretendiente, que comentó que ambos llevaban el mismo plan.
“Hablar de sexo es una cosa natural que hacemos los adultos y, sobre todo, el juego de la seducción es importante. A lo mejor me lo imaginaba ya en calzoncillos…”
Xose, en First Dates
Asimismo, ambos coincidieron en señalar que les fascinaba la ropa interior, destacando los calzoncillos, la lencería y las transparencias. Por si fuera poco, Xose confesó que su talento sexual era disfrutar y hacer disfrutar. La situación, que era inmejorable, acabó de la mejor forma. Ambos coincidieron en darse otra oportunidad en una segunda cita, para así terminar de conocerse.
