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Verónica el hazmerreír de First Dates por excusas baratas en su cita

La curiosa mujer dio un argumento que hizo sonrojar de pena a su cita de

Con cada capítulo de First Dates, miles de curiosidades y ocurrencias salen a relucir, en esta ocasión no fue la excepción y Verónica fue la protagonista. La chica llegó después del comensal que se presentó así. “Mi nombre es Enrique, pero en mi pueblo me conocían por mi coche, un Opel Tigra, y me quedé con el ‘Tigra’. Menos mal que no tenía un Corsa..”

Lidia Torrent fue la encargada de recibir al barbero, el cual le dijo su propósito de venir al dating show. “Vengo en busca de una chica que me entre por los ojos, que sea amable y nada borde”. Luego de ello, la chica apareció y cumplió el primer requisito, le entró por los ojos al chico, que quedó vislumbrado con su belleza. Que guapa, ¿no?” exclamó Matías Roure mientras Enrique le daba la razón.

Verónica First Dates
La estrategia de Enrique en robarle un pico a Verónica, le funcionó para obtener la segunda cita.

El comentario de Verónica que hizo sonrojar a Enrique de pena en First Dates

La química entre la pareja de comensales fue evidente, en los ojos de ambos se veía que se atraían físicamente, y en la mesa tras cada palabra, iban entrando en confianza. Luego de una deliciosa cena, los animados tortolitos pasaron al privado y comenzaron con la famosa fotomatón, pero el curioso momento vino cuando Enrique abrió una de las bolas, y en ella decía que tenía que darle un beso de película a su cita.

La chica se sonrojó de la pena y fue cuando lanzazo la exclamación que enmudeció por un momento a su cita. “que me ven mi padre y mi jefa”, luego vinieron las risas y al final aceptó un beso en la mejilla. El audaz chico se fue acercando a su cara cuando no aguantó y le robó un pico de su boca. Todos creían que Verónica reaccionaría mal, pero lo cierto es que fue todo lo contrario.

La picaresca reacción de Enrique le ayudó en una segunda cita con Verónica en First Dates

Después de su astucia para robar besos, el chico se quedó para ver como reaccionaba la algecireña, y luego de un momento de risas nerviosas, abrazó al barbero. Era una clara muestra de que a pesar de su timidez, Verónica le gustó ese atrevido pero inocente acto. “Te perdono pero el  el piquito me lo llevo”. luz verde para el animado comensal.

En la decisión final, el comensal se aventuró a ser el primero, y más allá de confirmar que si le gustaría quedar con la algecireña, exclamó, “No dejaría escapar a una mujer como ella”. Por su parte, Verónica también aceptó, ya que la pasó genial y además Enrique le hizo sentir mariposas en su estomago. “Vamos viendo, poquito a poco” sentenció la mujer.

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