Qarabag FK que llega a San Mamés en racha y descansado coco para el Athletic en la Champions League

El conjunto azerí suma pleno de victorias en Europa y apenas cinco goles encajados en nueve partidos oficiales

El Athletic Club afronta este miércoles una cita clave en San Mamés ante el Qarabag FK, uno de los equipos más en forma de la presente edición de la Champions League. El conjunto azerí llega a Bilbao con un pleno de victorias y la etiqueta de rival incómodo y peligroso, avalado por un inicio de temporada casi impecable.
El Qarabag ha ganado sus dos partidos europeos ante el Copenhague y el Benfica y presenta unos números sólidos: solo cinco goles encajados en nueve encuentros oficiales, entre la liga local y la competición continental. Su fiabilidad defensiva y su capacidad para castigar los errores rivales explican por qué se ha convertido en una de las revelaciones del torneo.

El Athletic, por su parte, llega entre dudas. Tras un arranque irregular y un juego menos fluido que el de la temporada pasada, el equipo de Ernesto Valverde afronta el duelo consciente de que no puede confiarse ante un adversario que combina intensidad, experiencia y ritmo competitivo.

Un Qarabag sólido y descansado, preparado para complicar la noche europea en Bilbao

El cuadro dirigido por Gurban Gurbanov, que domina su campeonato doméstico, aterriza en Bilbao con ventaja: llega más descansado, ya que no compite desde el pasado viernes. Esa frescura física puede convertirse en un factor determinante ante un Athletic que acumula minutos y lesiones en su plantilla.
El conjunto azerí destaca por su orden táctico, su fortaleza en bloque bajo y la velocidad de sus transiciones ofensivas. Su planteamiento pragmático ha resultado letal ante rivales de mayor presupuesto, y su confianza actual lo convierte en un oponente mucho más exigente de lo que podría parecer a simple vista.

El Athletic busca reencontrarse con su mejor versión europea en San Mamés

La gran preocupación en el entorno rojiblanco es el descenso de nivel respecto al curso anterior. El equipo no transmite la solidez ni la determinación que lo llevaron a brillar en Europa, y su falta de continuidad ofensiva ha restado pegada en momentos clave.
San Mamés, sin embargo, sigue siendo un factor diferencial. El ambiente, la presión y la conexión con la grada serán esenciales para impulsar al Athletic hacia un triunfo necesario para mantener vivas sus aspiraciones europeas.
La advertencia es clara: en Champions no hay rivales fáciles, y el Qarabag llega como prueba de madurez para un conjunto que necesita reencontrar sensaciones y recuperar la confianza perdida.