El ahora exseleccionador de la Selección España Femenina pensó que el escándalo que protagonizó el exmandatario de la RFEF no le afectaría, pero se equivocó y ahora pide auxilio al de Motril.
En el plano deportivo España le agradece a Jorge Vilda por el campeonato mundial, pero en lo personal están de acuerdo con su despido. El que fuese entrenador de la Selección España Femenina hace unos días, fue directamente involucrado al escándalo Rubiales. Esto a razón de que el míster no estaba de acuerdo con la dimisión de este, aplaudiendo lo que hizo en la premiación.
Pero el respaldo que Jorge Vilda le dio a Luis Rubiales no era por convicción sino por temas económicos. Y es que el expresidente de la RFEF le prometió que seguiría en el cargo hasta 2028, según lo estipulado en su contrato verbal. Pero no solo eso, le indicó que su sueldo subiría como agradecimiento por haber llevado a La Roja a la consagración del título mundial.
Jorge Vilda se hunde al igual que Luis Rubiales
La posición que tomó el entrenador con respecto al caso Rubiales fue incorrecta desde la perspectiva ética que demandaba la situación. Claro está que el madrileño se dejó llevar más por los impulsos económicos, más por lo que pudiese pasar con el de motril. Para cuando reconsideró su posición y se puso de lado de las jugadoras, ya era muy tarde.
A este aspecto también se unen otras polémicas que arrastra Vilda, como el hecho de que el entrenador también incurrió en una falta grave, en la final de la Copa Mundo Femenina. En un vídeo que ya se hizo viral, se muestra que el hombre toca de manera deliberada el pecho de su asistente Montse Tomé. Otro de los escándalos del técnico, es que le pedía a sus jugadoras no cerrar las puertas de las habitaciones donde se alojaban mientras estaban concentradas.
A pesar de que todo el mundo se le fue su contra, Jorge Vilda cree que la justicia siempre brilla
Claramente el míster madrileño no está de acuerdo con la decisión de al RFEF, pero la respeta. Sin embargo, va a utilizar todos los recursos legales para cobrar el dinero que se le adeuda según su último contrato verbal. “Tengo cuatro años de contrato más uno de antes. Me sentía seleccionador hasta 2028” ha repetido en varias ocasiones el exseleccionador.
“Me considero seleccionador hasta 2028. Es lo que me dicen mis abogados y más cuando ya había un acuerdo previo y consensuado en la Asamblea. En la Asamblea se dice públicamente, pero anteriormente se había perfeccionado ese contrato con una renovación por cuatro años” dice Jorge Vilda. Es evidente que el madrileño tiene todo en su contra pero aún así peleará por la promesa que le hizo Rubiales.
