Aimar Oroz, Juan Cruz y Rosier no se entrenan en Tajonar a cuatro días del partido; Lisci prepara un once con tres centrales y carrileros largos
El CA Osasuna encara su próximo compromiso liguero con problemas en la enfermería. A cuatro días del choque frente al Celta de Vigo en El Sadar, el conjunto rojillo acumula tres bajas confirmadas por lesión: Aimar Oroz, Juan Cruz y Rosier no participaron en el entrenamiento de este martes en Tajonar.
El técnico Alessandro Lisci ensayó durante la sesión con un sistema de tres centrales Boyomo, Catena y Herrando acompañado por Iker Benito y Bretones en los carriles, buscando reforzar la salida de balón y protegerse ante el juego vertical del equipo gallego.
Lisci repite esquema y refuerza la medular
El entrenador rojillo parece decidido a mantener la estructura de tres centrales, una fórmula que ha aportado mayor equilibrio defensivo en las últimas jornadas. En el centro del campo, Moncayola, Moi Gómez y Rubén García apuntan a la titularidad, en un trío que combina trabajo, criterio y llegada.
El equipo completará en los próximos días las últimas sesiones antes del duelo en El Sadar, donde Osasuna buscará reencontrarse con la victoria y frenar la irregularidad que ha marcado su arranque de temporada.
Un duelo exigente ante un Celta en alza
El Celta de Vigo llega a Pamplona tras sumar puntos importantes en sus últimas salidas y con un ataque cada vez más afinado. Lisci sabe que el encuentro exigirá intensidad y concentración durante los noventa minutos. Por eso, el preparador italiano busca afinar un bloque sólido, capaz de competir en los duelos físicos y explotar los espacios con velocidad por las bandas.
Osasuna, pese a las bajas, mantiene el espíritu combativo que lo caracteriza. Con el apoyo de El Sadar, el equipo confía en convertir la presión y la energía de su estadio en argumentos suficientes para volver a sumar tres puntos.
