La explosión de Camavinga que el Real Madrid esperaba no se ha producido y esta temporada podría ser su última en el conjunto blanco, donde parece no tener hueco en el once inicial
Durante el mercado de verano de 2021, el Real Madrid se anticipó a los grandes clubes europeos para hacerse con los servicios de Eduardo Camavinga. El centrocampista francés había destacado con el Rennes a muy temprana edad y parecía estar destinado a convertirse en uno de los mejores del mundo en su posición. Es por eso que el conjunto blanco accedió a pagar 31 millones de euros para cerrar su llegada. Pero cuatro años después, aún siguen esperando su explosión.
Si bien es cierto que Camavinga se ha convertido en uno de los mejores centrocampistas del mundo, aún no ha alcanzado ese nivel de super élite que esperaba el Real Madrid. En el club llevan años esperando su explosión definitiva, pero la realidad es que no tiene hueco en el centro del campo blanco. Un centro del campo donde este curso Arda Güler ha dado un golpe sobre la mesa para hacerse con la titularidad.
Camavinga, ante su año clave en el Real Madrid
Desde la llegada de Xabi Alonso, Camavinga no ha estado disponible debido a una lesión. Pero su regreso a los terrenos de juego está cada vez más cerca de producirse. Un regreso que genera gran expectación, pues existen dudas sobre si podrá conseguir un hueco en el once blanco. Por el momento, Tchouameni, Valverde y Arda Güler parecen bien asentados. Y el cuarto cupo disponible en la mediapunta parece reservado para Bellingham.
Es por eso que Camavinga parte con desventaja y tendrá que trabajar duro para convencer a Xabi Alonso. Todo sin olvidar las lesiones, que le han lastrado durante las últimas temporadas. Si no consigue romper y establecerse en el Real Madrid, el club podría escuchar ofertas. Y ya sabemos cuál es la cantidad que aceptaría el conjunto blanco para aceptar la marcha del internacional francés.
El mercado de 2026 marcará su futuro
Como hemos podido conocer, el contrato de Eduardo Camavinga con el Real Madrid acaba en junio de 2027. Por el momento, su renovación no supone una prioridad para la dirección deportiva, pues el próximo verano podría ocurrir cualquier cosa con el centrocampista. Y es que, si no termina convencer, el club está dispuesto a venderlo un año antes de que pueda marcharse a coste cero.
Si finalmente optan por un traspaso, el Real Madrid podría aceptar una oferta próxima a los 70 millones de euros. Y es que, pese a no haber explotado, aún, sigue siendo un jugador de 22 años con unas condiciones excepcionales para marcar una época. Además, su valor de mercado actual está fijado en 60 millones de euros, por lo que es una cantidad razonable que el conjunto blanco considera que un club de la Premier League podría alcanzar.