La era dorada de Golden State Warriors está tocando a su fin, pero la franquicia no quiere desprenderse de Klay Thompson ni de Draymond Green y confía en que su núcleo principal continúe unido
A lo largo de la historia de la NBA han existido grandes big-three que han hecho historia y lo han ganado todo. Michel Jordan, Scottie Pippen y Dennis Rodman, Tim Duncan, Manu Ginóbili y Tony Parker, LeBron James, Chris Bosh y Dwayne Wade o Paul Pierce, Ray Allen y Kevin Garnett son algunos de los ejemplos. Pero ninguno de ellos ha tenido tanta longevidad como el big-three de Stephen Curry, Klay Thompson y Draymond Green en Golden State Warriors.
Desde 2015, cuando ganaron su primer anillo juntos, hasta 2022, cuando alzaron el último, Golden State Warriors ha estado liderando la NBA. Lo han hecho incluso atravesando años muy complicados con graves lesiones en jugadores como Klay Thompson o Stephen Curry, quienes se han perdido temporadas prácticamente completas. Y ahora, ya en la recta final de sus carreras, la franquicia no quiere separarlos.
Golden State Warriors no quiere traspasar ni a Klay Thompson ni a Draymond Green
Ahora que la fecha límite se acerca en el mercado NBA, Golden State Warriors ha comunicado que no van a intercambiar ni a Draymond Green ni a Klay Thompson. Por sus características son jugadores que encajan en cualquier equipo y, además en el caso del escolta, está en su último año de contrato.
Pero pese a ello la franquicia de San Francisco no quiere incluirlos en ninguna operación. Su objetivo es que tanto Draymond Green como Klay Thompson acaben su carrera junto a Stephen Curry en Golden State Warriors. Para ello, tendrán que renovar el contrato del escolta, que este próximo verano será agente libre sin restricciones.
Chris Paul y Andrew Wiggins sí están en la rampa de salida
A diferencia de Klay Thompson y Draymond Green, quienes sí están disponibles para intercambiar son Chris Paul y Andrew Wigginis. El primero no ha dado el rendimiento esperado desde su llegada y la franquicia está dispuesto a traspasarlo, pues además tiene un contrato asequible con 30 millones de dólares no garantizados para la próxima temporada.
Por su parte, el alero canadiense sí tiene un contrato mucho más largo, hasta 2027 percibiendo un importante salario. Esta temporada, en la que solo promedia 12 puntos por partido, está siendo decepcionante. Es por eso que prefieren deshacerse de su contrato. Pero para ello tendrán que realizar un importante sacrificio, pues Golden State Warriors tendrá que traspasar a Andrew Wiggins con otras piezas de valor.
