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Volkanovski quiere su venganza: “Imaginen esa pelea.. sería lo más grande de la UFC”

Alexander Volkanovski no olvida. La derrota ante Ilia Topuria aún le arde como un tatuaje mal hecho. Y ahora, más que revancha, busca rescribir su propia leyenda

Alexander Volkanovski no fue simplemente noqueado en Perth, fue descifrado, descoronado y, quizás, desnudado ante sus propios miedos. La noche del 17 de febrero de 2024 no se ha ido; persiste como una pesadilla con guantes, que vuelve cada vez que el silencio del gimnasio se hace demasiado largo. Porque para un campeón, perder no es solo ceder un cinturón, es ver su imagen resquebrajarse frente al espejo del ego.

Ilia Topuria no solo lo venció; lo interrumpió. Como si en plena sinfonía, alguien hubiese arrancado el violín de las manos del director. Y aunque Volkanovski se recompuso con solvencia frente a Diego Lopes, aquella espina hispano-georgiana sigue clavada con saña. Lo dijo con la voz firme pero los ojos cargados de cuentas pendientes, quiere revancha, sí, pero no cualquier revancha. Quiere una ópera en peso ligero, con fuegos artificiales y redención incluida. Quiere, en el fondo, que el mundo lo mire recuperar lo que no debía haber perdido.

Volkanovski Topuria
Alexander Volkanovski no ha dejado atrás la noche del 17 de febrero de 2024

Una revancha escrita en las estrellas: pero con calendario incierto

La escena ideal está en su mente como una película que aún no ha conseguido productor. Topuria venciendo a Oliveira, y él apareciendo después como el villano redimido que exige otra oportunidad. “Ese sería mi mundo perfecto”, confesó Volkanovski, entre la resignación y la esperanza. Es curioso, en una disciplina donde el tiempo lo marca un cronómetro, las verdaderas batallas se libran en relojes más impredecibles, como el del destino o el del marketing.

Pero, por ahora, hay que esperar. Topuria tiene una cita peligrosa con Charles Oliveira el brasileño que convierte cada combate en una guerra santa y solo si sale ileso, la revancha soñada podría empezar a tomar forma. Volkanovski lo sabe. No todos los días se alinea el universo para un doble campeón. Aunque a veces, como en las mejores tragedias griegas, los dioses premian al que más ha caído, no al que más ha ganado.

Topuria: carisma, sangre y una diana en la espalda

Ilia Topuria se ha convertido en esa rara mezcla de talento salvaje y arrogancia magnética. Un luchador que combate como si tuviera algo que probar, aunque su récord perfecto diga lo contrario. Dieciséis victorias, cero derrotas y un estilo que combina precisión quirúrgica con brutalidad escénica. Es, ahora mismo, el hombre al que todos quieren vencer. Porque quien lo logre, heredará algo más que su cinturón, se quedará con su aura.

Y ahí, una vez más, aparece Volkanovski. Como una sombra obstinada que se niega a desaparecer. Sabe que ya no pelea solo por la gloria, sino por la narrativa. No busca revancha para ajustar cuentas: la busca para corregir una historia que siente mal contada. Porque en su universo, no hay derrota definitiva mientras aún queden puños, palabras y una promesa inconclusa.

EGD MMA