Bien adelantadas van las gestiones por el que en Londres es considerado un fenómeno de la zona
Siguen trabajando en la cúpula directiva del Arsenal en conseguir los mejores representantes posibles, una orientación liderada por Arteta que tiene como fin un jugador en el FC Barcelona. Tema que ha dejado escapar un medio inglés luego de sondear los huecos en la plantilla de los Gunners. En donde al parecer la portería sería la zona a revisar.
Por eso es que se ha regado la especulación y es en torno a Neto. Más allá que Leno va a ser el titular por decisión corporativa, no estaría de más lograr un acuerdo por el segundo al mando en la entidad culé. No solo es un jugador que tiene potencial, sino que al estar limitado en Cataluña buscaría una opción fiable en el entorno para prolongar su carrera.
El acuerdo entre los actores principales ya está gestado y Arteta parece atar al jugador del Barcelona bajo dos opciones
Lo primero que han usado ha sido el poder de convicción de los actores. Es decir, han usado a Arteta para que sea el encargado de mostrar las bondades de la institución por voluntad propia. Neto ha escuchado atentamente y se ha dejado tentar, de manera que al menos el acuerdo entre Arsenal y jugador parece listo.
Solo resta efectuar el paso entre clubes que a toda luz se antoja mucho más delicado. El tema es que en Londres esperan sumarlo cedido con opción de compra un año más tarde, una opción que no llama l atención en la ciudad Condal. Buscan acceder a dinero inmediato más allá de liberar masa salarial como pretenden los británicos por ahora.
Koeman ha sido parte de esta posibilidad indirectamente
Sin darle minutos y mucho menos esperanza Koeman ha sido un elemento de vital importancia en ese sentido. Tiene no solo el mando, sino que ha logrado cohesionar varios aspectos para bienestar grupal. En ese orden Neto no cuenta y se la juega a por todo con ter Stegen. Más allá de lo que eso pueda significar, prefiere darle chances a la cantera, que ha sido una de las exigencias del cuerpo directivo.
No contar con Messi supone un cambio rotundo en el manejo del equipo. Se van a sufrir algunos impases y el cambio generacional parece muy enfocado. Es momento de desvirtuar el patriarcado unilateral, para dar comienzo a una era más tradicional en donde el entrenador y su cuerpo técnico tengan mayor control de sus piezas.
