El jugador argentino está muy triste y desconcertado por lo sucedido este fin de semana
El CA Osasuna logró un importante triunfo este fin de semana frente al Rayo Vallecano, sin embargo al que no le fue muy bien fue al Chimy Ávila. El delantero argentino ingresó en la parte complementaria del encuentro, y desde ese momento sus minutos en el terreno de juego fueron una pesadilla gracias al Indar Gorri.
El grupo de aficionados denominados los “ultra” del conjunto navarro, se encargaron en todo momento de tirar arengas en contra del jugador. Fue tanta la presión que el mismo delantero reconoció después del partido, que se siente muy mal y triste por lo sucedido. Hay que aclarar que la barra de seguidores quiere la salida del atacante, no por cuestiones de rendimiento, sino por temas políticos.
¿Cómo se originó este lío entre el Chimy Ávila y la barra Indar Gorri del Osasuna?
El grupo de ultras, es conocido por ser la barra brava del Osasuna, y los cuales se ubican en el graderío sur del estadio El Sadar. Las características son típicas a las de un grupo de aficionados radicales, con comportamientos de Hooligans. Sin embargo, manejan una ideología política de izquierdas, y es por ello que se habría originado todo el lío con el jugador.
Al ser un grupo de espectro político de izquierdas, no se tomaron muy bien el hecho de haber visto una foto del Chimy Ávila con una camiseta donde aparecía el líder de Vox, Santiago Abascal. El episodio fue muy fuerte, y una clara traición para el Indar Gorri, o por lo menos así lo ve la barra de ultras. Es por ello que en todo el tiempo en el que el argentino estuvo en el terreno de juego, se escuchaban arengas como “Chimy vete ya”.
La presión de Indar Gorri puede resultar en la salida de Chimy Ávila, y el Espanyol podría aprovechar
Este lamentable hecho muy aislado del tema futbolístico, podría dejar al Osasuna sin uno de sus mejores hombres y referentes en el ataque. Jagoba Arrasate ha salido a defender a su delantero, y por ningún motivo lo dejará salir. No obstante la presión social puede jugar en contra del mismo Chimy Ávila, el cual pediría salir para este mismo mercado invernal.
Si esto ocurre, ya está listo el Espanyol con una oferta para acoger al jugador en la segunda mitad de la temporada. El contrato del argentino con el equipo rojillo, va hasta el 2023, por lo tanto el club perico pedirá su cesión hasta el próximo verano, con una posible opción de compra. La dirección deportiva del Osasuna aún no se manifiesta ante el hecho.
