Es noticia:

Grave sindios en Pesadilla en la cocina exprime al máximo a Chicote

Las propuestas del Gobierno dificultan la vuelta del programa de La Sexta

Alberto Chicote se ha convertido en una de las caras más divertidas de la televisión. La popularidad del chef se ha catapultado en Pesadilla en la cocina, donde es el absoluto protagonistas gracias a los divertidos momentos que protagoniza con los dueños de restaurantes. Y es que cada nuevo episodio es aún más surrealista que el anterior, algo que ha conquistado a miles de seguidores.

Uno de los últimos capítulos emitidos presentaba al primer restaurante chino en aparecer en el concurso. Y es que el Mizuna THAI era regentado por un joven que no había entendido demasiado bien lo que era el poder de liderazgo. Su equipo no se lo tomaba en serio, y eso es algo importante cuando quieres estar al frente de un gran restaurante. En palabras de Alberto Chicote, la coordinación y la organización es lo más importante para el éxito. 

Alberto Chicote

Y es que esto es lo que se tambalea en la mayoría de los locales de comida que deciden participar en Pesadilla en la cocina. La falta de organización y la falta de ganas y tiempo, hacen que el fracaso sea bastante esperado. Por ello, al compartir el Gobierno una de las medidas que harán posible la reapertura de los restaurantes y bares en España, las reacciones de algunas personas han sido bastante contrarias. 

Y es que muchos afirman que el hecho de prohibir la estancia en el local por más de 30 minutos para el desayuno y 90 minutos para comidas principales, va a hacer que la calidad de estos bajen considerablemente. Porque hasta ahora, esos 30 o 50 primeros minutos se van en esperar a que te traigan el primer plato.

Pesadilla en la cocina

De este modo, las nuevas medidas del Gobierno para reactivar la economía no ha contado con el beneplácito de los restaurantes, que se ven gravemente perjudicados. Las limitaciones no permiten que el negocio sea viable, por lo que Alberto Chicote y Pesadilla en la cocina tendrán que hacer frente a nuevas adversidades en aquellos restaurantes que visiten para ayudarles.