El deseo de regresar a la que fue su casa ha llevado al crack sudamericano a tomar medidas bastante fuertes
Si se toca el tema Neymar en Francia en este momentos es para una sola cosa, hablar de su salida. Los galos se han cansados de las polémicas, de las declaraciones controversiales y del rechazo absoluto del jugador por continuar vistiendo la camiseta del campeón. Eso sí, los jefes del cuadro de Parque de los Príncipes están al tanto y no van a facilitarlo todo a conveniencia de un solo protagonista.
Neymar ya ha dejado caer que su deseo es regresar, y como era de esperarse, ya realizó un trato con sus jefes el verano pasado. Ni las demandas, que ascienden a tres en los mismos tres años que lleva fuera han sido un impedimento, y mucho menos para Bartomeu que le venció y ahora le quiere re capturar.
La solución viene a cuenta de un movimiento directivo interesante
Hoy su valor asciende a los 170 millones de euros, pese a ya tener 28 años, y pese a estar envuelto cada vez más en situaciones extradeportivas que dañan su imagen. Lo cierto es que su calidad es innegable, y eso cuesta. De hecho, Messi lo viene pidiendo hace ya un tiempo y Luis Suárez está por esa misma vía.
Pagar esa cifra no está ni de cerca en los planes del club, lo que si se ajusta es plantear trueques con jugadores, que le permitan rebajar el pago integral que dejaría este hecho. La crísis del coronavirus les ha acabado de liquidar, y a eso hay que sumarle el momento, que los tiene sin el título de Liga, y eliminados de la Copa del Rey.
Bartomeu a rascarse el bolsillo por un jugador que todavía viene mostrando unos números interesantes
Las lesiones son otro hecho al que se le debe meter en la bolsa. Pese a todo eso, esta temporada en los escasos 23 partidos oficiales en los que ha podido estar, ha convertido 18 goles y ha repartido 10 asistencias. Para el PSG hoy no es una prioridad sostenerle, y como ha pasado con Cavani le soltarán con tal de darle el protagonismo absoluto a Mbappé.
El camino parece estar limpio, y Bartomeu es consciente de ello. Será de su cabeza que salga el siguiente movimiento que respalde o no la gestión y enterada en calor de este fichaje. Muchas son las fuerzas que van tras ese mismo hecho, incluyendo la del capitán, que es una persona bastante decisiva en la toma de decisiones.
