Hace unos años, el Barcelona hizo una venta de lo más extraña que solo con el paso del tiempo se ha podido explicar. David Villa abandonó el Camp Nou y puso rumbó al Calderón a cambio de solo cinco millones. En ese momento, Villa no terminaba de encajar en el nuevo proyecto y su ficha era muy alta para ser un suplente por lo que solo con ahorrarse ese dinero y el pequeño ingreso ganaban mucho.

Su venta llevaba una cláusula más que otorgaba derecho de tanteo al club blaugrana por dos canteranos del Atleti: Javi Manquillo y Saúl Ñiguez. Los dos han conseguido ser titulares en sus equipo, el primero en el Marsella y el segundo en el Calderón y son las dos apuestas más fuertes formadas en el club. El Barcelona solo tendría que igualar la oferta que llegue por parte de otro club para conseguir estos fichajes y de los dos el que más opciones tiene de salir es Manquillo, que volverá de nuevo a Madrid cuando acabe la temporada.